miércoles, 22 de abril de 2015

Rey del Caribe

—Rey Del Caribe—

Por favor: ¡Que alguien me mate!
No encuentro por qué siga vivo,
después de morir. Por favor,
mátenme.
Por favor, remiéndame.
Que estoy mucho más
que deshecho.

Siento el mar, pero no lo veo.
Huelo la brisa, pero no la siento.
Me siento, pero no me veo.
No me veo.
No me siento.
Sigo muerto. Vivo y muerto.
En el limbo.

¡Purgado!

martes, 21 de abril de 2015

El talante sombrío (buscando luz en medio de la noche)


—El Talante Sombrío (Buscando Luz En Medio De La Noche)—

He sido sobajado a no ser
más que un pendejo, por un
necio descuido que casi se
lleva mis huevos como pago.

Entonces, pienso que sería
mejor si me pongo a ver
las luces de los faros
en el tráfico de Aquiles
Serdán, y escuchar las
melódicas mentadas que
interpretan con el claxon,
y glorificar mi vista con
el espectáculo que dan
las sombras al momento
de relucir su contraste entre
ellas mismas:

Ver unas más oscuras que otras,
en medio de la inmensa
y gruesa noche que abraza
y cobija todo el plano visible.

No te dejes arrastrar por
el talante sombrío…

El espíritu fértil no busca oscuridad,
busca luz, pues es lo que menos hay.

domingo, 12 de abril de 2015

Soledad espacial

—Soledad Espacial—

Una perla blanca, una ostra negra.
Diez minutos sentado son diez mil años ausente.
Un potro blanco, su madre yegua negra.
Ni eso evade a tu mente.

Tus ojos se opacan cuando pierdes la cordura,
muere su brillo cuando pierdes algo o no eres tú;
y no eres tú cuando asientas a la locura.
Darse cuenta de eso cuando menos debía.

Acaricio las sombras, un marco surreal
en buenos malos tiempos de soledad espacial.
Amenazo a las paredes, disparo a los muertos…
… Acaricio las sombras, por mi soledad espacial.