viernes, 7 de septiembre de 2018

Speculum Veritatis (La tribulación durante la amenaza)

Hoy juego con el humo del cigarrillo
pensando en aquél tiempo de penumbras,
donde las pasiones prendían cual cerillos;
ahora sólo finjo cavarme la tumba.

El humo sigue entrando en la pupila
si de pretender se trata;
si el llanto esquivo y llano compila,
la amargura eterna siempre mata;

es canto al mar si del Kumbala se trata,
y completo llanto dar a la esquirla
cuando ésta es fractal que al alma empata
y no concilia el sueño que vivo mata,
y en lucidez se hace pena vivirla

Amor mío, esto ya no es verso.
Esto es peor que trova estrofa;
Se hace ronco aullido de mi ebriedad;
Es la tecla 'Enter' en violenta exposición,
dando un sagaz y soez 'click' y 'click'
cada que el renglón más o menos acopla
en lo antes escrito...
menos ahora, que ha sido capricho.

Vuelta a lo dicho; whisky en las rocas
serena el temple hirviente mío;
carcome la ansiedad y la decidia
que causa el no rimar al último verso...

que es bien querido y bien cuidado
ante las tensiones disonantes; beso
acaecido por lo ya hecho, previamente dado
a la gracia y gusto del creador; terso
perdón ante la falla hecha de lo mal pensado
y caricia interrumpida por el verso
de mi voz en quiebra igual callado,
igual en llanto, y este igual preso
soslayo que quiso ser acariciado,
quiso ser caricia de lo amado
y no más apariencia de mala intención
o intención de mala apariencia,
siempre hecho omiso por la truculencia
de la perturbada y maltrecha conciencia.

De aquellos amados, ellos, los admirados.
Todos esos, los seres ahora olvidados
y hechos al lado por lo ignoto del hado.

miércoles, 22 de agosto de 2018

Thelema XI

—Thelema XI—

Poetastro, amigo mío
¡Te vas fuera del personaje!
Poetisto, querido niño,
te pesa mucho este traje.

Opaco azul marino
y corbata de Klein ultramar
sofoca, asfixia el camino;
¡catarsis hizo en ti el personal!

La conciencia se fue a dónde debe:
al futuro y a otros sueños morar.
El alma, rígida, se puso a roncar,
aguardando a que la bruma llegue,
y el cuerpo, en cálido abandono
toma fuerzas de todo este descantono.

jueves, 16 de agosto de 2018

Miasma

–Miasma–

Amor mío, que cual cáncer
disuelves y coagulas,
y el revólver vacías
en mi lágrima fenecida;

es suplicio en lo debido
y sal amarga para el tajo;
vuelves vano lo mío sentido
cual vil ofensa; escupitajo.

Hay metástasis en mi candor
y es sofoco lo embebido;
de imploro escucha mi clamor,
no arrojes al vacío y olvido
lo noble que mora en mi ser yacido.

lunes, 23 de julio de 2018

Sonrisa lunar invertida — XIV/X/XIII

—Sonrisa Lunar Invertida—

Bella musa, sonriénte de cuarto menguante,
casi lista para, de nuevo, mi sueño cumplir y duplicar:
¡De tenerte y amarte, musa mía! Aunque claro tenga
que jamás podré tenerte, y mucho menos, amarte hasta matar.

Bello conejo sin pies, preciosa faz de cráter... ¡Excelsitud satelital!
Único, exótico ídolo de negro mármol diurno; ¡Sueño muerto!
Sutil, sublime Reina de blanca obsidiana nocturna; ¡Bruma muerta!
¡Feroz!, domadora del mar, amante del océano. Madre de
la lluvia... Eterno amor platónico de los charcales.

¡Y Salve!, mi clásico sueño NO cumplí, otra vez...
Pues sólo te veo ahí, arriba, con tu perfección sutil
de obsidiana blanca, postrada sobre tu infinito de mármol negro.
Ya no hay excelsitud que me acerque a ti. El sueño ya
no vive, ¡La Bruma ha muerto! Y, salve, ¡Ahora te veo acostada!

¿Será que también reposarás por la eternidad?,
¿así como todos los demás?
¿Como mi sueño de Verdad?, ¿como mi amor?
¿Así como a quienes amé?
¿Así como la Bruma?

...

¡Y Salve!, mi bella Luna menguante, creciente a llena,
no murió, no se irá, ni tampoco reposará por siempre.
Su deber continúa; domar al mar, amar al océano y sonreír
a los charcos. Sonreír de mil formas. Recostarse y ser infinita.
Y cada ciclo: Cumplir mis sueños muertos de excelsitud.

sábado, 21 de julio de 2018

Media luna — I/X/XIII

—Media Luna—

¡Oh!, mi media Luna, media viva;
mitad mía y mitad del universo...
tanto te escondiste en las nubes
que apenas te recordaba de noche.

Tus cuernos ya desafilaste, querida.
Tu tez blanqueaste más, mi amor;
sigues escondiéndote entre las
sombras, jugando con mi sentir,
prendiéndote y apagándote hasta el albor.

Debes creerme, musa mía, que sólo me
entrego a tu sonrisa de media boca,
a tu conejo sin cuerpo, a tu perspicacia
interrumpida por el torpe negro de mi alma,
por mi sucia sombra. ¡Oh, por todo lo demás!

miércoles, 18 de julio de 2018

Sonrisa lunar — XXIII/II/XIII

–Sonrisa Lunar–

Mueca en cuarto creciente
cuestión de días para media hacerse,
y mi antiguo deseo complacerse...
¡De hacerte feliz bruma mía!

Mueca de euforia; Medio semblante.
Media luna; Medio día.
Acabada la jornada sólo espero
sentado para que me alegre tu lucero.

Ahora tu sonrisa se mueve para el norte
y se vuelve oscura, dejando ver el infinito
atardecer en tus mejillas de cráter.
Dando por hecho que sigues en buen caracter...

El infinito se desvanece, dejando lugar
para una luna llena; una felicidad completa.
Mi viejo deseo se cumplió y se dobló,
Al menos eso me dice tu faceta.

Semana sin verte. Regreso y te encuentro a medias.
¿Qué sucedió?, amada mía.
¿Qué te pasó?, pareces luna de medio día...
¡Pálida!, traslucida. Dolida, afectada por el día.

...

Mueca en cuarto menguante
cuestión de días para en infinito volverse,
y mi sueño y amor al negro perderse...
¡De tenerte y amarte bruma mía!

viernes, 16 de junio de 2017

Malum

Entonces, al llegar a casa, el Duque de los Infiernos me observaba en la esquina frente a mis espaldas, y en un alarido de auxilio volviose en un famélico pero cada vez más fuerte felino silvestre; áspero y azorado, clamando por la ayuda pero desconfiando del movimiento apenas ágil y obtuso que hiciera.
–Ven, sube. Te invocan.
–¡La Hambruna¡ ¡La Peste!
  Allá iba, corriendo, girando las cerraduras como si de un frasco se tratara. Y fue que llegué a la azotea y volví a llamarle:
–¿Aló?, tch-tch-tch-tch-tch. Yo te invoco.
–¡La Guerra! ¡La Muerte!
  Entre la ceguera de la madrugada y el obstáculo de los barrotes, observaba al Señor, o su silueta, recorrer el ascenso en la escalera de caracol, yuxtaposición de la luz y obscuridad, mientras esa sombra de transformaba del corvo príncipe a la figura amorfa; las garras del dragón se retraían, la corona ennegrecida y disuelta en la cabeza, tapando el ojo derecho e iluminando el izquierdo, consumiéndola a un par de puntas suaves; aquella serpiente​ que lograba verse arquear entre su mano izquierda quedó unida al final de su cuerpo y el colmo de todos los miedos junto a la eterna red de los destinos, unidos y manipulados, se exponía en sus mesmerizantes ojos amarillos. Y todos los deseos marcados como cicatrices en su cráneo, pecho, espalda, patas, dedos...
–Ven y come. Yo te conjuro.
–Desátame del frío.
–Ven conmigo, que yo cuidaré de ti.
–Óyelo fuñir, todo lo pasma.
  De la caja plástica raspaba todo lo que pudiera engullir, mientras yo arrancaba de su cuerpo las asperezas que aparecían sobre sus cicatrices. Volví a alimentarlo; esta vez ignoró lo servido para él. La caricia del consuelo fue sino un arruyo a su ser, al soslayo del desasosiego, y encarnado a toda la divinidad, me dijo:
–Purrr, toca mi corona.
–Quiero verlo todo.
–Cierra uno de mis ojos con el pulgar.
–Quiero mi sueño.
–Lo traje conmigo y es para ti.
  Rompe el acurruco que tenía entre mis manos y va a beber de su cáliz, plástico también. El viento se petrifica. Ya no hay más frío. Él se escabulle entre la canaleta y a lo lejos se le escucha cantar.

lunes, 30 de enero de 2017

El aura (carpe diem)

Llega el sol, póstumo al albor
hiela la sangre, crispa el cuerpo
la luz sonríe, mira al hombre
hiela el temple, crispa el alma
sonríe el hombre, duda el mundo
asiente el hombre, ignora el mundo
luego presta atención y vuelve a ignorar
la duda toma control del hombre y la vida
los ojos apuntan al sol
el sol apunta al alma
y la luz se crispa;
todo fina donde comienza
una risa
y el silencio

miércoles, 25 de enero de 2017

El fracaso de los soles y las lunas

Ya llegan los nebulosos muros de polvo
Ya vienen los crepúsculos de color pastel;
Abrazo el obelisco, me hago estela;
Asciende el haz, vorágine progresiva,
Tremolina vectorial; rapto de la luz

Mezclen los humos y abranse las bocas
Escupa sobre la mano y bésela al final
Retuerzanse los ojos a través del fractal
Maldiganse las eras en el tiempo
y los nombres escritos en las rocas

Sombra dulce que abraza por la espalda
Lápida fría, silueta dura, axioma ancestral

domingo, 15 de enero de 2017

Los ojos

Los labios empujan
la saliva con el aliento
hacia la tierra negra

Roncan las cuevas del cuerpo
hunden y espesan el silencio
todo se vuelca en la catatonia

Existe el ser que ama
Y el ser que odia
Y el ser que ruega
Y el ser que culpa
No hay cabida en la existencia
para el ser que sólo observa